El Subsecretario Pablo Nardone acompañado por el presidente de ISCAMEN, José Orts recorrieron el proceso de producción de insectos estériles. Técnicos del Instituto expusieron sobre los diversos proyectos de Bioinsumos que desarrollan desde Mendoza, como así también, la postulación de Argentina al programa de investigación del Gusano Barrenador del Ganado que lleva adelante la OIEA. Iniciativa impulsada por ISCAMEN
A través de una solicitud formal ante el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y por las gestiones realizadas desde ISCAMEN, el Secretario de Bioeconomía de la Nación, Fernando Vilella, solicitó la participación de la Argentina en el proyecto de cooperación técnica que desarrolla la OIEA para el control del Gusano Barrenador del Ganado, comúnmente conocido como “mosca bichera”. Entre otras gestiones, la articulación entre Nardone y las autoridades de ISCAMEN, ha sido fundamental para alcanzar el objetivo
El Proyecto Regional de Cooperación Técnica RLA5088 que conduce el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), denominado “Fomento de la vigilancia y el control progresivo del gusano barrenador del ganado (GBG), mediante la técnica del insecto estéril", posibilita, a sus miembros integrantes, la disponibilidad de recursos para desarrollar pruebas e incrementar la producción de moscas estériles de GBG en Argentina.
El presidente de ISCAMEN, detalló que “junto al Subsecretario se ha entablado un dialogo y un compromiso que son de suma importancia para poner en valor la capacidad instalada de la Bioplanta, así como las acciones de protección fitosanitaria que se realizan en Mendoza”. Agregó, además, que “la participación de Argentina en el programa Regional de la OIEA, tiene como objeto diversificar las líneas de crías que se desarrollan en Bioplanta, como así también aumentar las posibilidades comerciales y de exportación a partir de su desarrollo”.
La participación de Argentina, permite una mayor integración para desarrollar e implementar la Técnica del Insecto Estéril para el control de la “mosca bichera”; plaga que afecta al ganado causando grandes pérdidas, incluso, con evidencia de afectación a seres humanos. Estas moscas producen infecciones cuando las hembras ponen sus huevos en las heridas de animales domésticos, silvestres e incluso seres humanos.
Mendoza, a través del ISCAMEN, ha desarrollado con éxito creciente el uso de la Técnica del Insecto Estéril (TIE) para el control de la mosca del Mediterráneo. Actualmente se ha realizado el ajuste de la técnica sobre Cochliomyia hominivorax, conocida comúnmente como gusano barrenador del ganado o simplemente “mosca bichera”. En tanto que se trabaja un acuerdo de exportación, con Uruguay para proveer insectos estériles, producidos en la Bioplanta, al vecino país para el control de esta plaga.
Visita a ISCAMEN de Autoridades del Senasa
Con el objetivo de analizar el desarrollo de las tareas fitosanitarias en Mendoza, el Director Nacional de Protección Vegetal del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Diego Quiroga y la Directora de Sanidad Vegetal, Wilda Ramírez, mantuvieron un encuentro en la sede central de ISCAMEN con el presidente de ISCAMEN, José Orts y los equipos técnicos del Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria de Mendoza.
Se abordaron líneas de trabajo técnico y de cooperación para fortalecer el manejo de plagas agrícolas y se analizaron, además, modelos de articulación público-privada para el sostenimiento de los programas de sanidad vegetal que desarrollan ambos organismos en Argentina y Mendoza.
Por parte del Senasa, también participaron Sergio Rossi, Director Regional Cuyo Senasa, Carlos Bontcheff, Francisco Lepron, Guillermo Cortes y Federico Reina.
El presidente de ISCAMEN, José Orts recalcó la importancia de la reunión y agradeció la visita y predisposición de las autoridades del Senasa, destacando que las posibilidades de trabajo conjunto y articulado son los ejes prioritarios de su gestión al frente del organismo provincial.
Finalmente, las autoridades y los técnicos presentes coincidieron en la necesidad de continuar fortaleciendo los programas de control sanitario, teniendo en cuenta que es de suma importancia para ello que los productores dispongan de una mayor participación e involucramiento